miércoles, 30 de julio de 2014

Crónica patánica CAF-Catalònia Air Force



Solidaria de la crónica anterior, In the Navy, toca en la presente abordar el flanco aeronáutico de nuestras futuras FF.AA. A la pujanza militar en mares y océanos hay que añadir un comentario sobre el Arma de Aviación. La Societat d’Estudis Militars (*) propone a Reus como base de la CAF, que no RAF, la Catalònia Air Force. Del aeródromo de Reus despegarán nuestros F-18 prontos a defender el espacio aéreo e interceptar las incursiones de los cazas españoles que sobrevuelan impune y amenazadoramente los límpidos e incontaminados cielos del Ripollés y de La Garrocha. 

Nuestros pilotos, ataviados con cazadoras de piel de cabra, lentes polarizadas de la marca Rayban, masticarán chiclé como el protagonista de Top Gun, y pondrán en fuga a los intrusos, mucho más feos que nuestros chicos, alegres y divertidos, pero buenos cristianos y amantes de sus novias, que les aguardan en el altar para entregarse a ellos una vez dado el sí quiero. Nuestros chicos se dirán por radio, describiendo prodigiosas piruetas en un mullido lecho de nubes tras los aparatos enemigos:

-Jan, espanyol a les tres en punt…

-Ok… Oriol… els hi fotrem una bona pallisa a aquests pòtols…

-Molt bé… Fem desprès una birra?

Pero alto, la acción preventiva, y/u ofensiva, de nuestra aviación, no se limita a la troposfera, quiá. Ya ha comenzado la colonización de la estratosfera y en breve seguirá la del espacio exterior. De hecho, parece que Jordi Bilbeny, Institut de Nova Història, gracias a sus enjundiosas y tenaces pesquisas, está en disposición de demostrar que esos listos cardones de los yanquis nos birlaron por la patilla la gloria imperecedera del primer alunizaje, allá por 1.969, como hicieron otros con el descubrimiento de América. 

Pero, a lo que vamos: un playmobil pertrechado con la bandera estrellada de rigor, lanzado desde Cardona, patria chica de Teresa de Jesús, que ya no de Ávila, según Jordi Bilbeny (él otra vez), ascenderá más allá de la estratosfera pronto a explorar la inmensidad del universo, emulando el prodigioso salto del intrépido aventurero austriaco Félix Baumgartner. La sensacional noticia abrió un informativo de TV3, no es coña. Fuentes dignas de relativo crédito nos han confirmado que el muñequito llevará un microchip musical incorporado con el himno del Barça, una canción de Núria Feliu y la cantinela del Espanya ens roba, Espanya ens roba, a guisa de lección inicial para obtener el nivel C de catalán, por si el simpático monigote se da de morros con vida extraterrestre que quiera avecindarse en Cataluña.
El objetivo es evidente: si un día nos invaden los bichos de la saga Alien, podrán parasitarnos y reducirnos a la más ominosa esclavitud, si así lo desean, pero hablándonos en catalán, qué menos…  

(*) La SEM fue fundada por Nicolau d’Olwer y otros militantes de Acció Catalana en 1924, luego ya van 90 años de militarista patanería. No es cosa de ayer. D’Olwer, separatista visceral, fue, ahí es nada, ministro español de Economía en 1931 con el gobierno provisional de la II República y, para la cinta, ¡¡¡Gobernador del Banco de España!!! en 1936 con el primer gobierno del Frente Popular.

PS.- Con relación a una de las últimas crónicas, Caixa o faixa, hemos sabido, dato de interés publicado por El Mundo el pasado 26 de julio, que La Caixa ha inscrito una filial, Microbank, en el registro bancario de Madrid para recibir, si fuera menester, depósitos de la entidad matriz… 

martes, 15 de julio de 2014

In the Navy: alístate a la Armada.Cat (en la foto varios navíos de la armada catalana)

Reverdece el antiguo poderío naval de la armada aragonesa, ahora bajo el pabellón estrellado de la Navy.Cat. La ANC, la entidad que dirige Carme Forcadell, quiere que los buques catalanes surquen de nuevo las aguas del Mediterráneo. ¿Será Quico Homs la reencarnación del almirantazgo almogávar que sembró el terror marítimo de uno a otro confín? 
Todo aquello que, cuando jóvenes, nos contaron los progres catalanistas, a saber, que si un patriota, un idiota, o la mili no mola, ni catalana ni española, que una bandera no es más que un trapo y la monserga del pacifismo congénito de los nativos, era pura filfa, una trola. De lo que se trataba, y el tiempo lo ha demostrado, era de socavar mediante la burla esos conceptos, patria, ejército y bandera, para sustituirlos por otros, los genuinos o casolans (caseros), es decir, por el militarismo aborigen. A los catalanistas, los uniformes, los fusiles y los desfiles, les ponen tiernos… no hay más que ver sus belígeras ensoñaciones. Se les hace la boca agua con el un-dos, un-dos.cat

Nos llaman a filas. Los banderines de enganche (banderons d’enganxament) recorrerán villas y aldeas para dotar de marinería y oficialidad los navíos de la Armada.Cat, que tendrá la encomienda de garantizar la inviolabilidad de nuestras aguas jurisdiccionales, de repeler los ataques de la pérfida armada española y reeditar la conquista de las islas Baleares como en tiempos de Jaime I.
El presupuesto, según la ANC, supera los 2.000 millones de euros (o lo que es lo mismo, el cierre, no ya de unas camas hospitalarias, sino de hospitales enteros). La cifra es un pelín austera  y no da para una flota muy allá, fuera de un par de corbetas o fragatas de segunda o tercera mano y a medio desballestar. El buque insignia será el portaeronaves Aymerich Despuig, legendario piloto arteramente rebautizado por los italianos como Americo Vespuccio, pero que era catalán de socarrel (de pura cepa), según han señalado los historiadores de la prestigiosa escuela Bilbeny, hurtado así a nuestra gloriosa galería de héroes náuticos. Indudablemente la base naval de la flota.cat será, cómo no, la playa de Pals, de donde zarpó en realidad Colón (es decir, Colom) para ofrecer a Occidente el descubrimiento de nuevas tierras.   

Toda armada necesita un duro entrenamiento, es cosa sabida, y ha de disponer de un aguerrido cuerpo de infantes de marina, impasibles al miedo, al fuego artillado y al fragor de la batalla. Hombres hechos de otra pasta, esculpidos en la misma forja que esas imponentes baterías que jalonan los fortines de la costa. Fuentes dignas de relativo crédito nos han transmitido la letra del himno adoptada por la marinería catalana, que no será la tradicional Salve, sino, por aquello de cultivar la diferencia, una tonadilla pop inspirada en un hit musical de los 80 del grupo Village People:


In the Navy,
A l’armada ten’s un lloc

In the Navy,
Allista’t no tinguis por

In the Navy,
Per la pàtria defensar

In the Navy,
I els xarnegos esclafar…


Asimismo, como todo el mundo ha visto en las pelis americanas, sea el caso de La chaqueta metálica de Kubrik, el cuerpo de marines ha de inocular el espíritu marcial y combativo en el corazón de cada hombre, y una herramienta inmejorable para tal fin es elevar la moral de la tropa mediante ceremonias iniciáticas con sus belísonos cánticos. Los estribillos que propone el instructor y que repite la soldadesca a coro y en carrera, serán en la naciente armada catalana los mismos que se emplean ya para motivar a los futuros inspectores lingüísticos de la Agència Catalana de Consum y a los candidatos más fanatizados a ocupar la dirección de los centros escolares. Para muestra un botón:

Que me’n dius del castellà a l’escola?
(y repiten los marines)
Ni parlar-ne o et tallo la titola (pilila)
(y repiten los marines)

El bilingüisme és una castanya,
I ens fotem de la puta Espanya.

Els bilingüistes fan molta pudor,
Millor s’estarien al camp de Sobibor.

Albert Boadella és un borinot

Fes vudú amb el seu ninot.